En este mes pleno de acontecimientos significativos hay una fecha conmemorativa del Día del Niño, el segundo domingo de agosto,según lo dispuesto por la Cámara Argentina del Juguete.¿No le da esto una connotación un poco alejada de lo que un niño implica para el futuro de la humanidad?
¿Pensamos que el niño de hoy será el hacedor del futuro? Si así es y tomáramos conciencia de ello, con cuánto más amor lo trataríamos respondiendo siempre a sus requerimientos.
Ser padres es una difícil tarea,se aprende a ser padres sólo siéndolo,pensando si lo guiamos con la suficiente libertad para que desarrolle con autodeterminación,su propia vocación. Un hijo no es una copia nuestra,cada ser llega a esta tierra a cumplir una misión ,démosle las armas para que se realice sano y feliz.
Tampoco pensemos que libertad es libertinaje.El niño debe diferenciar entre el bien y el mal, el ejemplo deberá tomarlo de sus padres,sus maestros y los mayores que lo ayuden y contengan.
Los ejemplos de vida son los mejores educadores.
Los derechos del niño fueron establecidos por La Asamblea General de las Naciones Unidas, dejando a criterio de cada país el día a conmemorar tal celebración ,que es ley internacional.
La misma Asamblea estableció sus derechos el 20 de noviembre de 1959. Los niños deben saber que les pertenecen todos esos derechos que constituyen un Decálogo pero que cada uno conlleva una responsabilidad y una obligación.
No olvidar la célebre frase: Mis derechos terminan donde comienzan los derechos de los demás y...¡FELIZ DÏA DEL NIÑO,todos los días del año!
